jueves, 31 de marzo de 2011

La ermita de La Caridad (I)

SIGLOS XVI Y XVII: LA ERMITA Y HOSPICIO DE SANTA ANA

La primera noticia vinculada con  la actual ermita de La Caridad, situada en la calle Francisco Bonilla, también conocida como la calle Empedrá, nos llevan al décimo señor de Fernán Núñez, don Alonso Gutiérrez de los Ríos y Venegas.

Alrededor de 1525, don Alonso por propia iniciativa y con cargo a sus rentas, mandó edificar la Capilla de Santa Ana, hoy ermita de La Caridad. Probablemente unos  cincuenta años después, en 1568 inicia su labor la cofradía de la Santa Caridad que se instaló en edificios anejos a la capilla, constituyendo el Hospicio de Santa Ana. Sus estatutos fueron aprobados por el Obispo de Córdoba don Diego de Ávila y Esquivel, el seis de julio de 1561.  En 1595 ya contaba con 254 hermanos.

Fue tal la importancia de dicha cofradía que acabó por sustituir el nombre, llamándose popularmente el Hospital de La Caridad, en lugar de su nombre original. A partir de ahora, hablar de la ermita será hablar del Hospital y de su cofradía pues las tres cosas, cofradía, hospital/hospicio y ermita van a ir unidas en la historia. Su función inicial era atender a los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela por la ruta del sur y a pobres enfermos de la villa.

En rojo, la actual ermita y terreno adyacente, hoy solar, que pudo ser parte del Hospicio
 Poco se sabe de aquellos edificios iniciales. Debían estar próximos a las afueras de nuestro pueblo en aquellos tiempos. En primer lugar,  por encontrarse próxima a los caminos para salir y entrar del mismo, facilitando el cobijo de los peregrinos y en segundo lugar, para que en caso de enfermedad contagiosa, no situarse dentro de la población y así poder aislar los focos de infección. Y poco se sabe de como era la capilla inicial de aquella época y si fue la que perduró hasta antes de la Guerra Civil, cuando fue incendiada.

Probablemente los pleitos y juicios vividos en a finales del XVI dentro de la casa de los Gutiérrez de los Ríos por la sucesión en el señorío de Fernán Núñez, hicieron peligrar la manutención del Hospicio y su capilla y por eso, se entregó a la cofradía de dicho nombre, la cual intentaría sacar a flote y mantener los servicios prestados con la ayuda de los vecinos y del cabildo.

El  siglo XVII no fue mucho mejor, y los antes señores, y ahora condes de Fernán Núñez, estaban inmersos en guerras para las que destinaban grandes sumas de dinero y ya tenían bastantes rentas destinadas a su Hospital de los Ríos, el Monasterio de la Concepción, la Parroquia de Santa Marina de Fernán Núñez y otras capillas, incluyendo la del Sagrario de la Mezquita  en la capital cordobesa,  como para acordarse del humilde hospicio y su capilla de Santa Ana.

Finalmente el Hospicio en torno a 1680 cerraría sus puertas por no poder mantener esta situación.

Información editada y ampliada procedente de:
Historia de la Villa de Fernán Núñez. Francisco Crespín Cuesta

3 comentarios:

  1. Hola Diego, interesante entrada. En Montalbán también existió una Ermita-Hospital de la Caridad, que estuvo ubicada donde ahora está el Teatro Municipal (antiguo Cuartel de la Guardia Civil). Dicha ermita databa del 1690 y a principios del siglo XX fue convertida en Cuartel de la Guardia Civil. Un saludo amigo.

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  2. Buenas Talbanés
    Pues si queda alguna foto antigua o algún resto, estaría genial si lo podemos leer en tu blog. Seguro que comparte muchas similitudes con la de Fernán Núñez, si es que estamos a un tiro de piedra.
    Un saludo

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  3. Interesante como todo lo que pones Diego. Enhorabuena. Me ha llamado la atención el segundo apellido de Alonso Gutiérrez, ya que hemos tenido por aquí un amigo americano, que estima es descendiente de ese apellido en la aventura americana de Ximenez de Quesada en Colombia, concretamente de Hernando Venegas Carrillo de Luque.

    Por otro lado, como funciona la solidaridad de la campiña, los dos Diegos y el Andrés, un triángulo importante de la cultura de la zona.
    Un abrazo a los tres.

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